¿Qué pasa si no pagas una multa?

Las multas de tráfico son algo muy común entre los conductores. Estas sanciones se imponen para garantizar el cumplimiento de las normas de circulación y mantener la seguridad en las carreteras. Seguro que te has preguntado, ¿qué ocurre si no pago una multa de tráfico? En este artículo te contamos qué tipos de multas de tráfico hay, el proceso de prescripción de estas, y lo que puede pasar si optas por no pagar una multa o si no puedes hacerlo debido a dificultades financieras. 

¿Qué tipo de multas de tráfico puedo recibir? 

En el mundo del tráfico existen distintos tipos de multas según la infracción que se cometa. Te explicamos las más comunes:

• Exceso de velocidad: Este tipo de multa se pone cuando el conductor excede los límites de velocidad establecidos. Las sanciones por exceso de velocidad varían dependiendo de cuánto se sobrepase el límite permitido.
• Aparcamiento indebido: Las multas por aparcamiento se ponen cuando el vehículo se estaciona en lugares no permitidos, por ejemplo, zonas reservadas para carga y descarga, entradas y salidas de garaje, etc.…
• Infracciones de circulación: Estas multas son propias de la indebida circulación, como no respetar señales de tráfico, no llevar puesto el cinturón de seguridad o usar el teléfono móvil mientras se está conduciendo.
• Saltarse semáforos: Saltarse un semáforo en rojo es una infracción muy grave, ya que pone en peligro tanto al conductor del vehículo como a otros conductores.

¿Prescriben las multas de tráfico?

Las multas de tráfico tienen un periodo de prescripción, es decir, un plazo a partir del cual ya no pueden ser reclamadas por las autoridades. Normalmente este periodo varía según el grado de la infracción: 

• Infracciones leves - Suelen prescribir en tres meses. Son por ejemplo: conducir con una luz fundida, un exceso de velocidad leve, estacionar indebidamente…
• Infracciones graves - Prescriben en seis meses. Estas pueden ser: exceso de velocidad, saltarse un semáforo en rojo, conducir sin carnet o circular sin seguro…
• Infracciones muy graves - Pueden prescribir en un año. Por ejemplo: conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas.

Seguro que te estás preguntando si, después de este periodo, ya no tendrías que pagar esta multa. Estás en lo cierto, no tendrías que pagarla, aunque no es tan sencillo como parece. Efectivamente, las multas tienen un periodo de prescripción, lo que significa que hay un tiempo límite durante el cual las autoridades pueden reclamar su pago. Si ese tiempo pasa sin que se haya iniciado un procedimiento para cobrar la multa (y aquí está la trampa), la sanción ya no puede ser exigida. Como hemos comentado, hay un determinado periodo de tiempo en el que las multas pueden prescribir, pero, una vez iniciado el procedimiento para reclamar esa multa, ese periodo de prescripción varía. 

• Infracciones leves: Después de que haya empezado el procedimiento, el nuevo periodo de prescripción se extiende generalmente a un año.
• Infracciones graves: Normalmente dos años o más.
• Infracciones muy graves: Más de tres años.

Es importante comentar que cada vez que la autoridad toma una acción concreta para reclamar dicha multa, por ejemplo, enviar una notificación o iniciar un proceso judicial, el periodo de prescripción se interrumpe y se reinicia. Esto quiere decir que ignorar una multa con la esperanza de que prescriba no es realmente una opción, ya que las autoridades suelen tomar medidas para evitar la prescripción y asegurarse de que la multa sea pagada.

¿Qué pasa si no pagas una multa de tráfico?

• Recargos y aumentos: Si la multa no se paga, lo más común es que aumente la cifra debido a un recargo. Normalmente, el recargo puede ser de un 10% más de lo que era inicialmente. Si la multa sigue sin ser pagada este recargo irá aumentando.
• Embargo de cuentas: Si después de un tiempo la multa sigue sin ser pagada, puede darse un embargo de cuentas bancarias hasta que se salde la deuda.
• Retirada del permiso de conducir: En algunos casos, quizás más extremos, puede llegar a retirarse el permiso de conducir del infractor.
• Acciones judiciales: Si la multa sigue sin ser pagada se puede iniciar un procedimiento judicial. Esto implica mayores costos y complicaciones legales que se sumarían a la multa original.
• Imposibilidad de realizar ciertos trámites: No pagar una multa puede generar restricciones para realizar algunos trámites como renovar el permiso de circulación y la obtención de ciertos permisos.

¿Qué pasa si no puedo pagar una multa?

Si no puedes afrontar el pago de la multa, existen algunas alternativas:

• Fraccionamiento del pago: Se puede solicitar un fraccionamiento o aplazamiento del pago. Esto implica que la multa se puede pagar en varias cuotas.
• Reducción del importe: Si el infractor se encuentra en una situación económica complicada es posible solicitar una reducción del importe. Esto no siempre es posible, pero hay ciertas ocasiones en las que puede ser considerado.
• Recursos y alegaciones: Si el infractor considera que una multa es injusta o incorrecta, es posible presentar un recurso o alegación. Este proceso implica argumentar y aportar pruebas para recurrir la multa y que demuestren la invalidez de la multa impuesta. 
• Trabajos comunitarios: En algunas ocasiones, y dependiendo de la gravedad de la multa, es posible convalidar el pago de la multa con la realización de trabajos comunitarios.

En conclusión, las multas de tráfico son cruciales para mantener la seguridad vial. Ignorarlas o no pagarlas puede resultar en recargos, embargos, pérdida del permiso de conducir y acciones judiciales. Es importante conocer los tipos de multas, sus periodos de prescripción y las opciones disponibles en caso de no poder hacer frente al pago, en caso de dificultades económicas. Actuar con responsabilidad y buscar soluciones a tiempo es clave para evitar consecuencias graves.